Los deportes electrónicos ("eSports") son una realidad pujante, pero el crecimiento del mercado de las apuestas los coloca bajo el riesgo de los amaños, según alerta en conversación con EFE el comisionado de la organización internacional ESIC, que lucha por la integridad de estas competiciones, Ian Smith.
"En los niveles profesionales y semiprofesionales de los deportes electrónicos, el gran problema son los amaños. La relación entre los 'eSports' y las apuestas es problemática", aseguró a EFE este abogado surafricano residente en Reino Unido que lidera la Esport Integrity Coalition (ESIC), que agrupa a los principales organizadores de competiciones electrónicas.
VER TAMBIÉN: Yenith Bailey: conoce todas las curiosidades sobre la portera panameña
El sector de las apuestas en deportes electrónicos puede facturar en este año cerca de 40.000 millones de dólares, según los cálculos de esta organización, que estima que el mercado podría alcanzar los 130.000 millones en 2020.
Son estimaciones, ya que las casas de apuestas no publican sus datos y a los 200 operadores que ofrecen este tipo de apuestas en deportes electrónicos se une "un masivo mercado invisible", asegura Smith, que puede multiplicar por diez o quince veces a los operadores accesibles.
Porcentajes
El 60 % de las apuestas en deportes electrónicos se producen en "Counter Strike", un juego de disparos multijugador, seguido por "Dota 2", de estrategia por equipos, que puede llegar al 20 % y el conocido "League of Legends", que puede llegar al 13 % de las apuestas, según esta agrupación de organizadores de competiciones.
Como se ha conocido en deportes tradicionales como el fútbol el tenis, el nivel de competición más afectado es el más bajo o menos profesionalizado, especialmente en competiciones donde "se puede ganar más dinero perdiendo que ganando", asegura Ian Smith.
VER TAMBIÉN: Gary Stempel se va 'muy molesto': 'Fueron tres goles muy tontos'
"Vemos más caos en torneos con premios más bajos, semiprofesionales, donde hay jugadores que amañan partidas por cientos o miles de dólares, cuando el premio global del torneo no supera los 5.000", añade este abogado, con una década de experiencia en lucha contra el fraude en deportes tradicionales como el cricket.
Los amaños relacionados con las apuestas son la principal ocupación de esta organización, por encima del dopaje -ESIC ha realizado más de 300 tests de dopaje desde 2016, sin positivos- o de las trampas para ganar, por ejemplo con ataques a los proveedores de servicios de Internet, que son castigados por los organizadores.